Los caminos perfectos...

estaba yo meditando sobre la incertidumbre de los caminos que hemos de recorrer en el futuro, pareciera que continuamente vamos en el camino pensando que tal vez estamos tomando la dirección equivocada; saber cual es el camino que conduce a un mejor futuro entonces es conocimiento intangible. Luego me lancé una pregunta primaria, ¿qué es el presente?, si partimos del punto sabiendo el estado consciente del presente entonces será más fácil digerir el proceso de toma de decisiones y asi construir el futuro o de lo contrario dejar ser conducidos. Lo hagamos de la manera correcta o incluso incorrecta nosotros construimos nuestro futuro, de cualquier manera los agentes externos existen no como limitantes sino como impulsores a mover nuevas fibras de percibir la vida.

Así hoy en agradecimiento a la vida por su incertidumbre diaria, le doy un poema a quién llega tan repentinamente junto a mi, en el mismo camino, el camino perfecto...

De ser cierto sería indolente
De ser indolente sería insípido,
Como el caldo sin sal,
Detrimento al gusto del paladar.
De ser insípido sería repudiado
De ser repudiado sería evitable,
Como el enemigo que no se afronta
Es constante quebrante al corazón febril.
De ser evitable sería inadvertido
De ser inadvertido sería fútil,
Como buscar la esencia en la nada
En el vació de una mirada sin alma.
Y en ti melancólica niña
De mirada indulgente cual centinela
La nada no navega sino el inmenso mar
Se vacía en tus ojos oceánicos
Evitarla es pretender negar el roce del aire
En mi piel, explorar la incertidumbre
Del mañana febril, inadvertido
A esa soledad que tú llenas,
La nombraré insolencia celeste,
De tener tantas estrellas y tú ser una de ellas
Lejana luz que acaricia
Noches insípidas estando a ciegas.
Y en ti un duelo se debate niña
Que el perdedor inerte muera,
A tanta pasión se abstenga indolente
De ser tú simple quimera.